lunes, 4 de mayo de 2009

Historia de una vida humana

Día 1: Inmediatamente después de la fecundación comienza el desarrollo celular. Incluso antes de la implantación, el sexo de la nueva criatura ya puede determinarse. El juego cromosómico está completo.Día 4: Las células comienzan a diferenciarse.Día 8: Implantación en el útero. La nueva vida ya está compuesta por cientos de células y ha desarrollado una hormona protectora que evita el rechazo por parte de la madre.Día 17: El hígado comienza ha desarrollar sus propias células sanguíneas.Día 18: Se aprecian las contracciones del músculo del corazón. Día 20: Aparece la base completa del sistema nervioso.Día 28: Han comenzado a formarse los ojos, la médula espinal, el sistema nervioso, los pulmones, el estómago y los intestinos.Día 30: La sangre fluye con regularidad. Empieza a verse el desarrollo de la oreja y la nariz.Día 35: En los ojos se distingue ya la retina, el cristalino y los párpados. Las orejas y la nariz empiezan a tomar forma.Día 40: Ya se puede hacer un electrocardiograma.Día 42: El esqueleto está completo y aparecen los reflejos. Los órganos genitales están diferenciados. Empiezan a distinguirse los dedos de pies y manos.Día 43: El cerebro ya da señales de actividad eléctrica. Se puede hacer un encefalograma.Día 49: Los labios se entreabren, hace pequeñas muecas y, de vez en cuando, saca la lengua; si le hicieran cosquillas, las sentiría. El cerebro está completo. Las huellas digitales de los pies ya están fijadas. Día 56: El niño puede formar un puño, tener hipo, chuparse el pulgar, dormir y despertarse. Funcionan todos los sistemas del cuerpo.Día 60: El cuerpo está completo. A partir de ahora, hasta los 23 años, el niño no hace sino crecer y perfeccionarse. Desde la 9ª semana siente dolor, puede agarrarse un cabello, recuerda los ruidos y mueve los brazos y las piernas.Desde la 11ª y 12ª semana respira a través del líquido amniótico, se da cuenta de los sentimientos de su madre, duerme y se despierta cuando ella lo hace. Desde la 18ª semana ya funcionan las cuerdas vocales, puede llorar. Da patadas y gira sobre sí mismo.
Fuente: Vida y muerte en el seno de una madre. Asociación Pro-Vida

RU-486, la píldora asesina

La píldora RU-486 (o Mitepristone) es una hormona esteroide similar en estructura a la hormona progesterona. Inventada en 1980 por el doctor Etienne-Emile Bauileu para la compañía Roussel-Uclaf, es parte de una nueva generación de drogas abortivas llamadas antiprogestinas. El cuerpo de la mujer produce una hormona natural esencial para que se produzca y desarrolle el embarazo: la progesterona; la RU-486 es un antagonista de esta hormona. Sólamente funciona en las primeras 9 semanas de embarazo, ya que, a partir de este momento, la mujer produce tanta progesterona que la píldora deja de afectarle. Debido a su alto nivel de fallos, los investigadores de Roussel comenzaron a combinarla con prostaglandinas (que producen contracciones uterinas). Los efectos secundarios incluyen: hemorragia de tipo menstrual, dolores y calambres similares a los de un aborto quirúrgico, náuseas, vómitos y diarreas. En muchos casos no se produce la expulsión del feto y hay que extraerlo quirúrgicamente.No es un anticonceptivo, sino un abortivo fulminante, que supone en Francia, por ejemplo, el 30% de los abortos. Está legalizado su uso en Francia, Gran Bretaña, Suecia y China, país este último que la utiliza en cantidades industriales. Sólamente en Europa ha producido 200.000 abortos en los últimos 15 años. Las grandes firmas farmacéuticas y la Organización Mundial de la Salud se han negado a comercializarla.

El milagro de la vida

Profesor Jerôme Lejeune, catedrático de Genética de la Sorbona (París): «Desde el momento mismo de la fecundación, desde el instante en que a la célula femenina le llega toda la información que se contiene en el espermatozoide, existe un ser humano».
Consejo de Europa, Resolución n. 4376, Asamblea del 4-X-82: «La ciencia y el sentido común prueban que la vida humana comienza en el acto de la concepción y que, en este mismo momento, están presentes en potencia todas las propiedades biológicas y genéticas del ser humano».
Doctor Bernard Nathanson, antiguo abortista y actualmente médico pro-vida: «Con la ciencia en la mano, en la actualidad, no hay ninguna duda: cuando se permite el aborto se permite un acto de violencia mortal, un acto deliberado de destrucción y, por lo tanto, un crimen».
Doctor Lyley, conocido como el «padre de la Fetología»: «El embrión domina su medio ambiente y su destino. Se implanta con tal fuerza fisiológica que suspende la menstruación de su madre. Tam-bién resuelve, por sí solo, el problema del trasplante; una admirable proeza: convive dentro de su madre, aunque sean inmunológicamente incompatibles. Ninguno de los dos recibe del otro ni tejidos ni sangre; sin embargo, se toleran mutuamente en un ambiente de parabiosis. Finalmente, determina su nacimiento; pues, sin duda, el comienzo del parto lo decide el feto unilateralmente».
Juan Pablo II, en la encíclica Evangelium vitae: «Aunque la presencia de un alma espiritual no puede deducirse de la observancia de ningún dato experimental, las mismas condiciones de la ciencia sobre el embrión humano ofrecen una indicación preciosa para discernir racionalmente una presencia personal desde este primer surgir de la vida humana: ¿Cómo un individuo humano podría no ser persona humana?»
Catecismo de la Iglesia Católica, nn. 2270 y 2272: «La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de su concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre ellos, el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida. La cooperación formal a un aborto constituye una falta grave, que la Iglesia sanciona con pena canónica de excomunión»